Hoy 30 de agosto finalizando una jornada de intensas emociones y anhelos plasmados, en esta ocasión a través de un grupo de colegas que con mucha garra y corazón lograron crear el área de Medicinas Integradoras en el Hospital Pediátrico Garraham y que hoy cumplieron 10 años de vida. Durante este tiempo lograron brindar en el seno de ese enorme hospital actividades con los padres y con muchos de los niños trabajando en el binomio padre-cuidador y cuidar al cuidador concretaron talleres y seminarios de reflexologia, masajes para bebes, actividades con mandalas , técnicas de relajación y meditación entre otras actividades que promueven una medicina que reconoce al ser humano como una integridad indivisible de cuerpo emoción mente , una medicina más humana , que integra al ser humano en su totalidad Estas actividades también van dirigidas a los profesionales del equipo de salud que reciben estas técnicas y que deseosos quieren capacitarse para brindarles a los niños y sus familias más recursos para sanar . Este grupo trabaja en investigación, educación y difusión así como practica clínica, si bien cuenta con el aval y aprobación de la dirección del hospital, los miembros del grupo de trabajo lo realizan ad honorem en el poco tiempo libre con el que cuentan ya que médicos, enfermeros y demás miembros realizan además sus labores cotidianas. Quiero hacer público mi agradecimiento al Grupo de Medicina Integradora del Hospital de Pediatría Garraham por convocarme para que transmita mi experiencia adquirida a lo largo de más de 25 años en el ejercicio continuo de la Medicina China, así también confirmar mi compromiso absoluto para el futuro con el equipo. Además por este medio agradecerles por las bellas devoluciones que me realizaron y decirles nuevamente felicitaciones por lo logrado hasta hoy, por tanto esfuerzo tanta lucha por todos lo conseguido en favor de los niños, futuros hombres y mujeres quienes reciben desde hace 10 años mucho más que medicamentos, manos que abrazan, oídos que escuchan, ojos que miran a los ojos y corazones cálidos y abiertos. Saludos fraternos, Marcelo Biolatto.